Resumen de la situación

En el 2024 fallecieron 28 personas en accidentes mineros acontecidos en el sur de Venezuela. De ese total 23 ocurrieron en el estado Bolívar y 5 en el estado Amazonas.

Distinto a lo que ha pasado en los últimos siete años anteriores, en el que el principal municipio donde se producía más fallecidos por accidentes mineros era el municipio El Callao, en el 2024 fue el municipio Sifontes, aunque sin ser una gran diferencia. En este año hay víctimas de estos eventos distribuidos de manera más amplia, menos concentrado en un lugar.

En el 2024 el estado Amazonas tuvo dos eventos, el 22,2 % de los casos, con un total de 5 fallecidos, que dan alerta de que la política extractivista del “Arco Minero del Orinoco” sigue avanzando en esa entidad. Siempre se debe recordar que el Arco Minero es una política generalizada y no circunscrita a un espacio geográfico determinado, a pesar de que el régimen lo niegue.

En este año ha habido un alto número de víctimas indígenas que, más allá de la opacidad informativa aplicada por el régimen, en especial con el caso de lo ocurrido con el accidente en “Bulla Loca”, da señales graves del incremento de la participación indígena en actividades mineras informales.

El caso del accidente ocurrido en “Bulla Loca” requiere ser objeto de una investigación detallada que saque a la luz la verdad de lo ocurrido en ese sector de la Reserva Forestal La Paragua, se establezca quiénes y cuántas fueron las víctimas reales, dé con los responsables de la tragedia, se analice los roles de funcionarios militares y civiles que tienen que ver con el área y se haga justicia.

Más allá de la incertidumbre con las cifras reales de accidentes, fallecidos y lesionados, lo cual está asociada a la falta de responsabilidad, credibilidad y vacío de estadísticas oficiales, hay una tendencia, observada en Bolívar y Amazonas, de que cuando surgen bullas hay altas probabilidades de que se produzcan accidentes mineros. Esto ocurre por la anarquía, sin respuesta institucional, como por ejemplo con el uso de “cilindros / barrancos” por toda el área de la bulla, o por la sobrecarga de mineros en espacios de alto riesgo. Tal como se ha analizado en los informes anteriores de SOSOrinoco sobre esta materia, desde el 2017 se han reportado un sin número de accidentes en la región, en especial deslizamientos de tierra y colapsos de túneles, que resultaron en pérdida de vidas. En todos los casos los accidentes están relacionados con la falta de medidas de seguridad adecuadas y por las condiciones laborales peligrosas, todas las cuales son promovidas por la inacción y la “vista gorda” de las autoridades mineras y laborales, como si se tratase de que Venezuela careciera de leyes e instituciones que velen por la prevención, salud y seguridad laboral, así como de normas de seguridad minera.