El Cartel de los Soles y el Tren de Aragua inundan Brasil de droga ante el bloqueo caribeño

El estado Bolívar ya no solo exporta oro de sangre, sino que se ha consolidado como la plataforma de lanzamiento para el narcotráfico internacional hacia el sur del continente. Un operativo reciente de la Policía Federal de Brasil ha dejado en evidencia la operatividad de esta nueva ruta, gestionada en alianza entre la narcodictadura y las megabandas criminales.

El hallazgo en la represa Balbina
Las autoridades brasileñas interceptaron una aeronave proveniente de Venezuela cargada con 380 kilos de "Skunk" (una potente variedad de marihuana) en la represa Balbina, municipio Presidente Figueiredo, estado Amazonas. La operación, que incluyó la participación de la Fuerza Aérea Brasileña, terminó con el piloto lanzándose al agua para escapar, una escena que ilustra la desesperación y la audacia de estas redes transnacionales.

Replanteo del negocio: El Cartel de los Soles mira al Sur
El exfiscal venezolano Zair Mundaray ha sido claro en su análisis: este incidente no es fortuito. Representa un "replanteo del negocio del Cártel de los Soles". Al tener bloqueadas las salidas tradicionales por el Mar Caribe debido a la presión internacional, la estructura narcotraficante del régimen ha decidido utilizar la inmensa frontera sur para sacar la droga hacia Brasil y de allí a otros mercados.

Troncal 10: Corredor de la droga custodiado por "El Niño Guerrero"
Para que esta logística funcione, es necesaria una garantía de seguridad en tierra. Según los reportes, el tránsito de estos cargamentos atraviesa territorios controlados férreamente por líderes del Tren de Aragua, específicamente "Niño Guerrero" y "Petrica", quienes dominan amplios sectores de la Troncal 10.

La coincidencia es macabra: la droga fluye por las mismas carreteras donde la Guardia Nacional extorsiona a los ciudadanos comunes, pero deja pasar caravanas criminales. Este evento ocurrió apenas dos días después de que el presidente Lula da Silva inaugurara el Centro de Cooperación Policial Internacional (CCPI) en la Amazonía, un esfuerzo regional que nace desafiado por un Estado vecino convertido en narcoestado.